Las luces altas en muchos países pueden usarse en estas condiciones siempre y cuando se eviten deslumbramientos: Circulando a más de 40 km/h, entre el ocaso o anochecer y en la mañana, en la salida del sol. En las afueras de poblados, en las vías que están poco iluminadas o dañadas, en mal estado. A cualquier hora del día, por túneles, pasos inferiores y tramos de vía poco iluminados.